Gracias a las inspiración dada por los chicos ajayenses (dícese, P-Chan) y mientras espero tomar un helado en un día frio; decidí escribir algo sobre una de las cosas que hacen delirar mi ser: las máscaras venecianas (para todos los que deseen tal temática en fiestas de disfraces y "Halloweenenses").

Algo de Historia...

Las máscaras venecianas tienen una larga historia debido a su utilidad como protectoras de la identidad de quien lo porta. En la ciudad de Venecia generalmente los construían a base de papel maché, tejidos, joyas y plumas. Han resurgido como emblema de carnaval actualmente, calificadas como emblema de hedonista celebración.



En la antigüedad fueron usadas en la clase alta de sociedad, especialmente para el anonimato de actividades; desarrollándose una cultura de ocultación de la identidad que se convirtió en una actividad fundamental y diaria en algunos lugares. Muchos de los "secretos" fueron de base pragmática. Por el tamaño (pequeño) de la ciudad, era perfecto para que ciudadanos con diferentes actividades tales como el espionaje, apuestas, etc.


Sin embargo durante la República las cosas se descontrolaron; llevando a una decadencia de valores con la proliferación de la promiscuidad, placeres desenfadados y por último llevando a ciudadanos relacionados con la iglesia al completo hedonismo y frivolidad.

Las leyes prohibitivas se impusieron en la época de la "Serenissima República" por 1458, en donde se prohibida a los hombres la entrada a los monasterios vestidos de mujeres (¿) y por supuesto, el uso de las máscaras que luego se popularizó, utilizándose ahora como ícono del carnaval de Venecia.


Curiosidad:El Doctor Peste


Actualmente un personaje del carnaval veneciano que fue en sus orígenes una marioneta, inspirada en el atavío de los que se llamaba entonces "médicos de la peste".

La  "Peste Negra" o peste bubónica es una de las epidemias más mortales que se conocen,  y que afectó a Venecia, debido a su contacto con los barcos que llegaban del oriente.


La máscara se caracteriza por llevar un pico de ave que en ese entonces se creía causa de la plaga; contacto con las aves. La superstición decía que el vestirse con una máscara con pico de Ave alejaría la terrible peste.

La máscara tenía en su interior una variedad de perfumes a modo de filtro contra la fetidez que emanaban los afectados por la peste, también incluída lentes ve vidrio rojo que hacían herméticas las emanaciones. El atuendo se complementaba con un largo abrigo de cuaro, guantes y un sombrero de ala ancha. En la mano derecha se llevaba un palo blanco con un reloj de arena alado, utilizado para mover o examinar al paciente y personas cercanas.

La presencia de la mascara era de mal agüero y sólo ha alcanzado su característica festiva en los últimos tiempos del carnaval.




Rose  -nice-